La fabricación estadounidense ha sido moldeada por pioneros como Frederick Taylor y Henry Ford que desarrollaron técnicas relacionadas con la gestión científica y la producción en masa. Minimizaron el costo de un producto analizando el proceso de producción y dividiéndolo en pasos simples, cada uno realizado por un trabajador especializado capacitado específicamente para ese paso. Una secuencia de tales pasos realizados por mano de obra de bajo costo y baja calificación podría resultar en un producto sofisticado, como un automóvil, a un costo relativamente bajo.
Estas técnicas para minimizar el costo pusieron el precio de muchos productos al alcance de la persona común, marcando el comienzo de la era de la producción en masa y el enorme crecimiento industrial. Este modelo industrial se basaba en la producción de alto volumen, pero pronto se extendió a donde las empresas fabricaban productos diferentes pero similares. Grupos de personas con habilidades enfocadas en un proceso particular se convirtieron en departamentos funcionales.
Con un enfoque en la eficiencia, cada departamento tiene un supervisor para garantizar que el departamento opere a un costo mínimo. Para hacer esto, deben minimizar los recursos, maximizar la utilización y proporcionar valor por lo que se les paga por hacer. En un entorno de producción de baja mezcla y alto volumen, este método funciona muy bien.
Sin embargo, muchas empresas en este mundo altamente personalizado no tienen el lujo de producir grandes volúmenes de la misma cosa una y otra vez. ¿Qué estrategia de producción se necesita para un fabricante con una alta mezcla de productos de bajo volumen, o incluso personalizados?
Esta presentación señalará algunas de las mentalidades de gestión profundamente arraigadas que son obstáculos para tiempos de entrega más cortos y proporcionará formas prácticas de superarlos. Ejemplos de estos obstáculos incluyen la necesidad de mantener nuestras máquinas y personas ocupadas todo el tiempo; empujar a los empleados a trabajar más rápido, más duro y más horas; dando gran importancia a la métrica de entrega “ontime”, etc.
La audiencia aprenderá la diferencia entre desear plazos de entrega más cortos y lograrlos. Los proveedores, los fabricantes por contrato y los OEM pueden beneficiarse de la comprensión de los obstáculos para los plazos de entrega más cortos que están “incorporados” en muchas empresas hoy en día.
El contenido se basa en un libro de 2010 de Rajan Suri, It’s About Time que explica la estrategia QRM.